El éxito económico1 es un estado al que se llega por multitud de causas. Entre los factores que intervienen se encuentran el esfuerzo, la suerte, los contactos, la situación económica de partida, y más en general, los privilegios de los que parte cada uno.
Y sobre este tema, resulta curioso lo que cada clase social cree que lleva al éxito. En USA, se hizo una encuesta amplia en la que se intentaba averiguar lo que cada nivel socioeconómico cree que determina el éxito (de nuevo, económico).
Según esta encuesta, los ricos, o clase alta, creen que el éxito se debe principalmente al esfuerzo, la educación y el coraje o espíritu emprendedor ("courage"). Esta visión se corresponde con la típica actitud de la clase alta de creer que se han ganado lo que tienen. Por contra, creen que la suerte, las conexiones (a quién conoces) o la corrupción ("cheating") afectan poco al éxito. Probablemente, para continuar con su marco mental de "me merezco todo lo que tengo".
La "clase media", considera que lo más importante para el éxito es la educación, seguido de las conexiones, y finalmente, el esfuerzo. Al mismo tiempo, consideran que los factores menos importante son el talento, la suerte, y el coraje. Parece una visión optimista y con la idea de que pueden conseguir lo que quieran si lo intentan.
Finalmente, los pobres, la clase baja, considera que el factor más importante para el éxito son las conexiones, seguida de la corrupción ("cheating") y de la riqueza de la que se parte ("initial capital"). Consideran también que los factores menos importantes son el talento, la suerte, y el esfuerzo. Es una perspectiva pesimista, ya que han visto que su esfuerzo no se ve recompensado y ni siquiera la suerte les puede sacar de su situación.
Lo cierto es que la visión del éxito que tienen los ricos peca de un fuerte sesgo del superviviente: Su experiencia personal les dice que han llegado donde están por su coraje, su educación y su esfuerzo y no se fijan en los que se han caído por el camino teniendo los mismos méritos. El mundo está lleno de gente que literalmente se parte la espalda trabajando con gran coraje (muchos con buenos estudios) por una mierda de sueldo.
Estos patrones de pensamiento también tienen su componente política. Según algunos estudios, la creencia de que el éxito o el fracaso está directamente relacionado con las acciones de cada uno se corresponde bastante con el pensamiento de la gente de derechas (republicanos en USA) mientras que la gente de izquierdas (bueno demócratas, es decir, menos de derechas) piensan que el motivo se debe más a circunstancias fuera del control de la gente.
Las pocas evidencias sobre este tema parece que le quitan la razón a los ricos y a la derecha2. Por ejemplo, en el Reino Unido, 3 cuartos del aumento de riqueza de los últimos 30 años proviene sencillamente del aumento del precio de la vivienda, lo que desmonta el mito del “espíritu emprendedor”. En España, por otro lado, el 53.8% de la riqueza de las grandes fortunas es heredada (es peor en Alemania, donde es un 65%).
Finalmente, algunos estudios con simulaciones han mostrado que cuando todos los individuos empiezan con la misma cantidad de dinero de partida, pero con diferentes "capacidades" (inteligencia, habilidad, o esfuerzo), el elemento que más afecta al éxito económico final es... La suerte... Uno de los factores menos considerados por todas las clases sociales3.
Por tanto, que la suerte os acompañe.
Identificar el éxito económico con el éxito a secas es un problema en sí mismo, ya que las investigaciones nos muestran que en general el aumento de sueldo no mejora el bienestar.
¡CHORPRECHA! ¡NO SE PODÍA SABER!
Esto no es un alegato en contra del esfuerzo. El esfuerzo es condición necesaria para tener éxito. Pero no suficiente. Es como la relación entre tener piernas y batir el record del mundo de los 100 metros lisos. Es necesario (sin ellas no se puede hacer), pero no garantiza nada.